Lina Balanta Valencia llegó de Colombia a la Argentina hace 10 años, cuando era muy joven. Hoy describe estar “enamorada” de su nuevo país, pero sus comienzos no fueran para nada fáciles. Atravesó situaciones muy complejas e incluso tuvo que vivir a la intemperie, en la calle.

Pero ese quiebre fue también un punto de partida para salir adelante. Le dio el poder y la iniciativa para poder reafirmarse como persona afro. Porque Lina “no quería ser negra, me dolía mucho ser negra”. Sentía que no encajaba en la sociedad, que era diferente.

Entonces, a partir de esa situación límite comenzó a luchar por su sueño: ser cantante. Y en ese camino para hacer realidad su sueño, Lina logró valorarse a sí misma como mujer, como migrante, y como afrodescendiente, y conseguir el respeto de los demás.

Más allá haber cursado una carrera considerada más tradicional, Lina siente que tomó la decisión correcta cuando se concentró en el canto como proyecto de vida. Recibió elogios de quienes la escuchaban, que la alentaron a no rendirse. Y finalmente pudo lanzar su primera canción, “Oye”, donde pudo expresar sus sentimientos. Ahora va por su siguiente meta: presentarse en un escenario.

Hoy Lina, cuyo nombre artístico es Afrikalina, se siente orgullosa de lo que es y de dónde viene: “No es fácil para nadie, y más que nada para una persona migrante. Pero nada es imposible en la vida, por eso una tiene que chocar para volverse a levantar y ser más fuerte”.

 

Lina nos cuenta su historia en este video, que presentamos con ocasión del Día de las Mujeres Migrantes en la Argentina.

“No es fácil para nadie, y más que nada para una persona migrante. Pero nada es imposible en la vida, por eso una tiene que chocar para volverse a levantar y ser más fuerte”.